El pez por la boca muere...

"No los sigas ni los bloquees, pero te avisamos x las dudas. De todos modos, la historia de Sandra la conocen todos los de Intrusos" Miguelcontte

lunes, 4 de marzo de 2013

El ave más linda

 
Durante la temporada de reproducción, el macho del pato mandarín pierde su color pardo semejante a la hembra y luce colores fascinantes e infinidad de matices intermedios: El macho es un ave inconfundible: presenta un copete rojo con brillos metálicos de color verde sobre la frente y dos franjas laterales de color blanco o crema muy claro, en las que destacan los ojos oscuros y el pico de un tono rojo coral. Asemejándose a unas barbas, posee unas plumas de un color naranja cobrizo. El pecho y la garganta son de color morado; el vientre es blanco, y los laterales son de un tono crema con dos bandas azuladas, que dan paso a sendas franjas anaranjadas curvadas hacia arriba.

La belleza de estos patos fue al principio su maldición y luego su salvavidas. Durante cientos de años, esta ave fue considerada como ave que atraía la suerte y el amor. Y su presencia fue muy codiciada por cortesanos de Japón y China y por coleccionistas de todas partes del mundo. Actualmente, viven en libertad unos 65.000 ejemplares, varios más en zoológicos y parques de todo el mundo. Su belleza, sus colores, han sido pues la identidad y el argumento de su protección y su recuperación. Ahora, se encuentra sin peligro de extinguirse.

El pato mandarín no supera los 45 cm de longitud, es pequeño y robusto, pesa no más de 500 gr y  se alimenta de algas y semillas. En invierno se agrupan en pequeños grupos y al acercarse la primavera la hembra elige al macho más vistoso y colorido para poder tener sus "patitos feos".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que bonita. La naturaleza es capaz de diseñar hasta lo impensado para reproducir su especie.